domingo, 26 de diciembre de 2010

MANIFIESTO

PIENSO
Hay tantas cosas de las que no he escrito
Que mis ojos han visto.
Hasta hace poco la poesía era mi refugio
¿cómo invitar a mis monstruo a sentarse conmigo a la mesa?
Mis letras volaban
Huían de las pestes mediáticas
De los golpes opresores
Del hambre burocrática
De las asesinadas enterradas en tumbas de arena.
Temí llamar las cosas por su nombre
Alzar el dedo
Con miedo a señalarme
Y callé.

Hundí mi cabeza entre libros
Mis ojos quemaron miles de páginas
Desgasté mis horas entre partituras
Pinturas, esculturas, proyecciones…
Huí del hambre en viajes interminables por las cocinas extranjeras.
Para olvidar a mí pueblo iletrado
Aprendí otras lenguas
Que enseñaban a la propia a avergonzarse
Que disgregaban mi identidad
Volteando mi vista hacia un mar que ansiaba cruzar;
Con miedo a hablar tarasco
Preferí siempre leer griego.

Hablé mucho porque temía mucho
Escuché poco porque sabía poco.
Me he ganado mis silencios
Estos nuevos ojos
Éstas nuevas tintas
estos nuevos versos.

Entiendo que un verso no hace una lucha
Entiendo mi condición de eco
En éstas líneas confieso lo que pienso y siento
No lo que estoy haciendo
Trazando caminos incautos
Lejos de los amos de las cruces y las armas
Lejos de los ojos afilados de las casas editoriales
Repartiré estos versos entre mis iguales.

Renunciar a la rima
Fue mi primera rebeldía
Admitir que el poema es siempre un poema
Fue mi segundo ataque
Ahora que he quemado el lenguaje
Que he sido llamado hoguera de patio
No pienso regresar al silencio
A la meditación
A buscar el ser
Siendo
Escribo en la trinchera de la duda
Cargo en mi espalda un pueblo
Que apenas voy conociendo
Llevo en mis letras una lucha
Que apenas voy descubriendo.

Hay hombres que esperan toda su vida una señal
Un mano que escriba sus letras
La mano que escribe la mía
Son cientos de manos
Manos con hambre
Manos con sangre
Manos tiesas
Manos pálidas
Manos callosas
Manos enfermas
Manos tras las rejas
Manos enterradas
Manos cercenadas
Manos que no tiene un taco
Manos que tocan una guitarra de palo
Manos pequeñas que juegan con tierra.

Otros hombres esperan toda una vida
Por unos ojos para descubrir la poesía
Mis ojos tienen cataratas
Mis ojos tienen lágrimas
Mis ojos tienen moretones
Mis ojos han visto montañas de basura
Mis ojos se han cerrado ante las macanas
Ante las botas, ante las balas
Se han sorprendido con las llamas
Mis ojos tratan de abarcar los campos
Recorriéndolos
Mis ojos están rojos de tanta sal
De tanta miseria
De tanta conjuntivitis
Mis ojos no miran los relojes
Mis ojos están ahítos de santos
Mis ojos
Todos esos miles de ojos
Que no son de ningún color
Que no tienen ningún rasgo
Estos ojos
Que me he ganado
Dejan la poesía para la poesía
Y al poeta le dan sus alas...

Los pobres son los dioses por los que hablo
La injusticia la musa sorda que me susurra los versos
El relámpago que me toca
Es el flagelo sobre la espalda de mi pueblo
Poeta en llamas
Renacido de sus cenizas anticipadas en tantas hogueras sin carne
Le devuelvo lo que le tomé a mi gente
Que beba de mi sangre el pueblo
Hasta que pueda devolverle su agua
Habitarán en mí
Hasta que recuperemos sus tierras
Hablarán a través de mí
Hasta que el hambre no les haga cerrar los libros.

La poesía no es una lucha
Es una voz
Y esa voz
Viene de un canto
Que lleva 600 años durmiendo.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Venaditoazul 1

Saber que el silencio es un ensayo de la muerte
es la muerte la que afina la orquesta
extiende para todos el escenario
matiza los colores en cualquier cuadro
la muerte, ineludible toque final de todo tacto...

Hay perdido entre bosques
un venado vulnerable, vulnerado por su sombra
dando brincos inmóviles
el venado mira la frondosidad del bosque
se pierde en el amplio laberinto de los árboles
su ojo línea blanca
le arranca instantes a los ojos
el venado no comprende tanta simplicidad
no entiende jamás la fiesta de las formas
el cantar del agua
por eso camina nervioso, entre brincos
desecho en miradas
sus oídos palpitan temerosos de cualquier ruido
el venado no entiende que lo sigue su sombra
por eso quiere tener las patas fuera del suelo
el venado maldice no ser ave...

La muerte tiene rincones que ninguna luz conoce
nombres que se quedaron en lo impronunciable,
bañada de cenizas frescas, recién paridas del fuego
la muerte es una niña sollozante.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Carta a Ítaca

No



Yo no tengo ojos para contemplar tantas hogueras.



Jamás he comprendido el vaivén de las risas.







Distancias



Olvidos



Cartas muertas bajo mis brazos



¡Nunca han sido alas!







No



Yo no tengo tiempo para jugar con el silencio.



Estoy absorto en el delirio



en el grito.







Cansancio interno



Pulso abierto



No



Yo no quiero conocer a tus fantasmas.







Diré adiós a tus sombras



Tienes una casa en mis letras.







No



Yo no tengo ya tus pasos en mi sangre.







Absorta como estás



En la mudez de una preñada espera.



Espera.



Ese vuelo



no llegará ya más.











"De Ulises en la cueva de Calisto, a Penélope perseguida por sus amantes en Ítaca".

viernes, 10 de diciembre de 2010

Andrómeda y la espada.

Andrómeda y la espada.

Tienes una larga cadena
La haces sonar la noche entera.

La oigo entre tus sollozos
Cuando sollozas.
La oigo entre tus roces
Si no hay rosas.

Esa cadana
Ha de atarme.
Lo consiento.
Siento.
Cien cadenas
Que han de atarme
A la roca que delira en el desierto de la forma.

Traes
además,
una sed para saciarme
ojos que conocieron mis ojos
ocultos detrás de mis pupilas…

un cuchillo
además
para matarme
un cuchillo y un puñado de cenizas.

Buscas y encuentras
Siempre niños tristez
Buscas y encuentras
Casas incineradas por la angustia.

Colocaste las trampas en el claro
atrapaste desprevenidas a las musas
sangran… hemorrágicas y sordas…
ríes ahora
que te azota un mar más grande
que las tristezas
que las trizas hechas de los ángeles
que las brazas de sus ojos calcinados por la gracia
que las esquirlas de luz enrerecida que llamamos alma
que las llagas profundas del tiempo donde fue a parar el asombro
que las líneas más tenúes del movimiento que conocen el secreto del lenguaje
destrozada
hasta la carne blanca de tu transparencia
donde se pintan las estrellas en su movimiento constante
una
a
otra
se suceden.

Yo sólo sé de ecos
<>
<>
<>
Nada puedo hacer por tus huídas
Entregada al misterio de tus cadenas
deliras
sin saber que ya comieron de tus senos
las bocas sedientas de la grieta que me mira.

Desde el abismo por donde me contemplas
Me atas.
Lo consiento.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Re-velación de "Versos Felinos"

Re-velación

Piérdete
en tu casa del lenguaje.
mientras en el claro abierto
arderé la noche entera...
sólo una noche
arderé mientras te pierdes.

Ya esparcidas mis cenizas
Volverás a la luz
Inmarcesible
Sostenida en el silencio
Del humo.

Entonces todo callará
Perderás tu brújula.
ya no estaré
quieta vendrá la mañana
a quemar tus piedras de aire
y arderás
como ardí
mientras te perdías.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Penélope y las llamas de "2509km"

No me importa el papel que representes
Siempre serás mis letras
Mujer infalible
Persígueme y juguemos el juego de las sombras :

Tengo yo dos ojos mujer para mirarte
Más profundos sin embargo son mis recuerdos
Tengo boca mujer para decirte
Todos los muertos con los que cargo.

Entre noches oscuras nacieron tus cabellos
Fuegos que parieron a las albas
¡Qué destino de poeta más certero !
Encontrar la cuna de los mares.

Vienen a morar en tu vientre todas las criaturas
Las ha convocado el centro de tu ombligo
Vanidosa perfección que no hace ruido
Mientras lucha mi vientre con el vientro tuyo.

Siento callar las campanas
De la muerte prematura del retoño
Escucho cantar las oscuras aves
Vienen del árbol insensato de las risas.

Ya conozco mujer esos mares asabaches
Me ahogaron sus sirenas mudas
Extasiadas en el vuelo de la espina.

Ya conozco también los elementos
Risa
Cuerpo
Ritmo
Beso

No quiero enfrentarme a tus hogueras primitvas
Lanzan chispas a la espalda trémula del miedo
Presiento mujer
Tus despedidas
Enviaras bestias grises
Se tragaran todos los relojes
Detendrán todos los vuelos
Violarán la luz
Esparcirán un sabor de alquitrán en los espacios
Ya presiento mujer
Tus despedidas.

sábado, 4 de diciembre de 2010

Juego de "2509 km"

Dolor se llama el juego
Y duele.

A veces cuando miro sin mirar
Se refugia en mis pupilas tu voz,
Entonces te invento
Y jugamos a las escondidas
Unas que nunca puedo ganar.

En las noches para dormir
Recito nanas a mis ojos,
Son letanías
Con el compás de tus pasos.

Ausencia se llama el juego,
Y se ausenta.

A veces cuando miro sin abrir los ojos,
En mis párpados descubro el negro de tus cabellos,
Y siento el estupor de la luz
Penetrando en el silencio,
Jugamos al avión,
Y yo espero ya tu vuelo.

Amor se llama el juego,
Y ama.